Letras y Cuentos de mi Sangre: octubre 2007

martes, 30 de octubre de 2007

Tus cartas


Si tú supieras, mi amor,
Qué valor tienen tus cartas,
Cómo son de compañeras,
Como las espero si tardan.
Si tú supieras, mi amor,
Cómo angustiado en la noche
Las pongo sobre la almohada,
Me escribirías más cartas.
Si tú supieras, mi amor,
Cómo yo leo tus cartas,
Me escribirías en ellas, te quiero,
Te quiero mucho,
te quiero, amor de mi alma.

28 de Febrero de 1968

domingo, 28 de octubre de 2007

Solo y triste


Un cielo celeste, celeste y sereno,
Al abrir los ojos pude contemplar.
Pero estaba solo, tan solo y tan triste
Que apenas le viera me puse a llorar.

Cuánto tiempo hace ya que no te veo,
Cuántos días tan largos ya sin escuchar
Tu voz melodiosa, tu andar de tórtola,
Ir, venir, besarme, luego rezongar.

Es verdad, comprendo que tú, que me quieres,
Que soy en tu vida todo pues no hay más,
Quieres que yo sea un ser tan perfecto
Que nunca en el mundo se pueda igualar.

Por eso, mi vida, yo sigo tu ejemplo,
Y ahora que estoy solo te interpreto más,
Y soy un alumno tan bien aplicado
Que cuando regreses aún me amarás más.

10 de Octubre de 1955

jueves, 25 de octubre de 2007

Para "Moni" y "Negro"



A mis dos queridos hijos, a mis pequeños pichones
A los que tanto yo extraño en el día y en la noche,
Les mando de Gualeguay un abrazo tan grandote
Como es inmenso el cariño que Dios tiene para el hombre.
Quisiera tenerlos cerca, pasar con ustedes horas,
Jugando como otro tiempo a mil juegos, a mil cosas.
Pero el camino es distancia y a veces la distancia sombra,
Que impide podernos ver y estar juntos a toda hora.
Yo siempre, todas las noches, converso con vuestras fotos,
Les pregunto cómo están y ellas nunca me responden.
Pero al mirar las estrellas les pregunto por vosotros
Y ellas me cuentan qué hacen y también cómo se portan.
A veces me dicen “bien”, otras veces me contestan
Que andan medio caprichosos,
Que el Moni es contestador, que el Negro anda empacoso.
Pues yo no creo mucho lo que las estrellas dicen
Porque mis hijos pequeños no pueden portarse mal,
Pues son dos niños hermosos.
¿Verdad que no se portan mal? ¿O que mejor se han portado?
De aquí en más, si me prometen ser obedientes y buenos,
Les prometo una sorpresa que será como un regalo,
Como un regalo que quieren tener dos buenos hermanos.
Todo regalo sorpresa es algo muy ignorado,
Es algo que muchas veces soñamos tener
Y cuando llega a nosotros, hoy por fin lo disfrutamos,
Porque muchos días y noches con eso hemos soñado.
¿Qué será lo que papá nos tiene ahora reservado?
Pórtense bien y sabrán cuál ha de ser el regalo
Y a la vez escríbanme y díganme qué han pensado.
Yo les diré frío o caliente y a lo mejor acertamos.
¿Estamos de acuerdo, hijos?
Ya que hablarnos no podemos pues el teléfono es caro,
Tratemos de recordarnos y de escribirnos una carta
Cada vez que lo podamos.
Recuerden siempre que lejos, por muchos largos caminos
Que nos tienen separados, siempre estaremos unidos
Por esos lazos sagrados que son la sangre y el amor
Con que Dios nos ha ligado.
Un beso fuerte y grandote y un abrazón apretado
Para esos hijos queridos que siempre están a mi lado.

20 de Enero de 1972

miércoles, 24 de octubre de 2007

Caminante


Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Caminante, caminante que demuestras
Que no sangran tus heridas,
Las heridas laceradas de tu cuerpo,
Las heridas producidas por la vida.

Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Yo he sufrido y te comprendo,
No me ocultes tus heridas.

Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Las heridas que la vida a veces abre
Sangran siempre, caminante, esas heridas.

Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Caminante, caminante, tengo envidia
Porque sangran mis heridas
Y no puedo como tú yo cobijarme
En el largo camino de la vida.

Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Quién pudiera cortar anclas, caminante,
Y perderse en los caminos de la vida.

Caminante, caminante que caminas
El camino de la vida.
Caminante, caminante, yo te admiro
Y venero de tu alma las heridas.
Las heridas, caminante, que tú escondes
En el largo camino de la vida.

19 de mayo de 1957

martes, 23 de octubre de 2007

Mi amor es pequeño



Me ha sido dado contemplar sus ojos,
Y con ello no me hube conformado;
Quise más, su voz, su timbre me brindó amoroso
Y luego, su calor, sus manos.
Luego pedí de sus labios la sonrisa
Mas después, en constante pensamiento,
No conforme aún, le pedí la boca y ahora
Pretendo que me de su cuerpo.
¿Es que acaso merezco lo que pido?
Ser dueño de su alma y de su cuerpo
Para ofrecerle a cambio y escondido
Un amor pequeñito, bien pequeño.
¡Pequeño sí, mi amor es tan pequeño!
Ella merece un amor tan grande
Como puro es el mío, aunque pequeño;
¡Y pensar que podría ser tan grande!

15 de Marzo de 1950

lunes, 22 de octubre de 2007

Historia de un amor que terminó

Es sabido que cuando un amor termina difícil es volver a empezar. Difícil volver a creer y confiar, difícil olvidar y perdonar. Pero tarde o temprano el tiempo borra las marcas, mitiga el dolor y ayuda a ver las cosas desde otro plano. Aunque ese amor se haya ido abruptamente, sin explicaciones ni reclamos… casi como leer un libro y quedarse con las ganas de saber el final.
Pero fue un gran amor. Eso dicen…

“Durante mucho tiempo esperé una palabra que me ayudara a cerrar esta historia. Pero entendí que no hay lugar para la charla y lo acepto, no quiero comprometerte. No hay rencores ni reproches. No nos debemos nada. Sé que estás muy bien. Encontraste a la persona que te hará feliz, te amará, te cuidará y te brindará todo lo que necesites. Nada te hará falta de ahora en adelante. No podía ser de otra forma porque sos una gran persona y merecés lo mejor. Y lo mejor te está pasando hoy.
Por el amor que alguna vez nos unió sólo pido que no te escondas cuando me ves, ni escapes de mí como si temieras un castigo o una vergüenza. Deseo que seas feliz, lo deseo de corazón con la misma generosidad que tuviste siempre para conmigo. Y quiero que sepas que estoy a tus órdenes cuando me necesites, como esos grandes amigos con los que uno siempre puede contar”.



Los que hemos sufrido grandes dolores y pérdidas y conocemos la sensación de ahogo que produce tanta tristeza, angustia y soledad, también aprendimos a esperar, somos pacientes… Y llegará el día en que todo nos parezca lejano, una imagen estática de lo vivido. Y entonces renaceremos en un sentido más perfecto, menos vulnerables. Un día el tiempo será el cristal a través del cual evocaremos el recuerdo con una sonrisa.

domingo, 21 de octubre de 2007

MADRE


Cuando lleguéis a comprender la vida,
Os pido que sepáis perdonarme,
Debí de sufrir mucho para irme,
Dejándolos al lado de su Madre.
Siempre pensé que Madre es el símbolo
De lo más puro, por nada reemplazable.
Ella gesta en su vientre vuestras vidas,
Y nos da vuestra vida con su sangre.
Ella ofrece sus pechos delicados
Sin importarle que los mismos cambien,
No le interesa si quedarán erguidos,
Sólo piensa que debe amamantarles.
Ella da sus desvelos en la noche,
Cuando el vagido del hijo la reclama,
Nunca tiene calor ni siente frío,
Pronto corre saltando de la cama.
Ella es el ángel guardián que vela el sueño,
Es quien cuida del hijo toda nana,
Es quien corre enloquecida y ciega
Cuando un peligro cualquiera lo amenaza.
Ella es todo en el mundo, la que no escapa
De todo sacrificio por formarnos,
La que oculta a veces sus disgustos
Para que no se enoje vuestro padre.
Ella aguanta mil veces travesuras
Que el niño siempre realiza sin pensarlas,
Es la paz, la armonía, la esperanza,
Que ha de guiarnos el día de mañana.
Ella es todo en el mundo, es lo más puro,
A quien nadie puede reemplazarla,
Por eso debéis quererla siempre
Porque ella por siempre es vuestra Madre.

12 de Marzo de 1972

viernes, 19 de octubre de 2007

En algún lugar

jueves, 18 de octubre de 2007

Alma de acero

Ayer fue la despedida, primero besos de día,
Luego manitas queridas, que agitándose de lejos,
Decían en su lenguaje, hasta pronto, hasta la vista,
Y un ruido infernal con fuego, de motores a turbina.

Majestuoso y lentamente el avión tomó la pista,
Yo corrí hasta el espigón, quería en la recorrida
Cuando el avión regresara ya veloz tomando pista
Con el pañuelo en el aire, decirles, adiós mis vidas.

Mas sólo fue una intención, no volvió el avión de nuevo,
No le importó que esperara yo agitando mi pañuelo,
Y entonces pensé, qué sabe, si tiene el alma de acero.



4 de Febrero de 1968

miércoles, 17 de octubre de 2007

La noche, la ilusión y el día


El día cerró sus ojos, la noche abrió sus pupilas.
Las estrellas con sus luces límpido cielo salpican,
Y en el silencio profundo las almas de los amantes
Se entremezclan y se excitan.
Cuarto de luna creciente tenuamente ilumina
El contorno de dos cuerpos que se llenan de caricias,
Promesas llenas de amor, palabras llenas de almíbar,
Sueños, caricias y besos que a veces no se realizan.
Mudo testigo es la noche y las sombras son propicias
Para un romance de amor que quizá pronto termine,
Pero siempre hay esperanzas, siempre hay algo que se anida
En lo profundo del alma, aunque deje sus heridas.
Noche de amor y de sueños, de ilusiones infinitas,
Cuna de miles romances, corazones que palpitan
Con la ilusión y la fe, que la misma noche invita
Para crear un futuro que luego el día aniquila.

26 de Enero de 1972

martes, 16 de octubre de 2007

Unas mañanas más


Pocas mañanas más
Y ya no volveré a sentirme solo.
Unas mañanas más
Y estarás tú junto a mí.
Y ha de brillar el sol
Que aunque hoy alumbre,
Lo ignoro.
Y ha de alumbrar la luna
Mi dicha junto a ti.
Unas mañanas más,
Todo será distinto.
El aire tendrá
Un raro perfume de azahar;
La música, alegría;
Las estrellas, misterio;
Y la noche...
Un deseo interminable de amor.

27 de Octubre de 1954

La mar


Así, con rumbo a la mar,
Entró una vez Alfonsina
Esperando que una ola
Le quitara la vida.

Así también a la mar
Yo mi cuerpo entregaría
Para que la mar oculte
Por siempre las penas mías.

Pena de mi soledad,
Pena de mis alegrías,
Pena que será mi pena
Mientras yo tenga vida.

Por eso en la mar quisiera
Ahogar por siempre mi vida,
Para que así en lecho azul
Descanse mi alma tranquila.

Alma que penando vas
Desde que estás en mi vida,
¡Oh, qué hermoso debe ser
Ir por las olas mecida!

7 de Febrero de 1954

sábado, 13 de octubre de 2007

¿Qué es la vida?



Tristeza de soledad
Y soledad de la muerte,
Nostalgias de amor herido
Y de sueños que se pierden,
Fustigadas esperanzas
Que quizá después se mezclen
Con la pena y los dolores
Y las ansias de la muerte.
¿Es eso entonces la vida?
¿Son puros sueños que crecen?
¿O es acaso un solo sueño
Que nace cuando se muere?
Dolor que carcome el alma,
Que interpretar no se puede,
Que se vive y que se sufre,
Hasta que un día la muerte
Pone final definido
A aquel sueño que se muere,
Para comenzar el otro
Del que ya nunca se vuelve.

11 de Noviembre de 1967

viernes, 12 de octubre de 2007

Es sólo para ti


Es innegable que tu amor ha muerto,
Sólo queda de aquello en ti un recuerdo
Que en la separación y la distancia
En poco tiempo más estará yerto.
Mas no debes llorar por lo pasado,
Aquello ya pasó, lo de hoy es nuevo.
Tienes derecho de vivir tu vida
Sin que queden en ti remordimientos.
El tiempo cura del alma las heridas,
No se termina todo cuando muere el amor,
Cada noche es un sueño, cada día es distinto,
Y siempre queda tiempo de admirar una flor.
Olvídame, te pido en nombre del futuro,
Porque tu amor y el mío carecen de ilusión
Y todo lo que hacemos ya no tiene sentido.
Olvídame, te pido, para bien de los dos.
Yo enfocaré el futuro como las golondrinas
Y bajo los cielos nuevos renace una ilusión,
Con ansias de distancias y con sed de caminos,
Espero poder darte para siempre el adiós.
Conserva en tu recuerdo lo bello de lo nuestro,
Aquello que fue siempre lo puro del amor,
Y piensa que el Destino ha buscado pretextos
Para ahogar todo aquello que nació cual la flor.
No temas tú por nada, pues yo no he de olvidarme
Que me diste un día lo puro del amor
Y a cambio de los frutos que tú pudiste darme
Yo he de brindarte siempre, de lejos, protección.
Adiós es la palabra que sólo corresponde
Cuando, como en tu caso, se brinda como amor,
Un poco del rezago de aquello que ha quedado
Como muestra tangible de un superado amor.
Pero adiós no es palabra que significa muerte,
Tan sólo es la distancia, es la separación
Por tiempo indefinido, quizá ya para siempre,
Con lo cual hallaremos la paz para los dos.
No pienses que yo sufro, ni sufras tú pensando,
Lo poco que yo tengo compartiré con vos
Y así tú con mis hijos han de vivir contentos
Sabiendo que en mi mundo existe una ilusión.
Cuando quieras hablarme, si es que me necesitas,
Recuerda que en el cielo me puedes encontrar.
Hay una estrella nuestra, ella nos comunica,
Y en ella estaré siempre, hasta la Eternidad.

20 de octubre de 1971

jueves, 11 de octubre de 2007

Significado de la flor

Las flores son para muchos un homenaje postrero.
Son para otros la ternura, son lo hermoso, son lo bello.
Símbolo de amor y paz, de ilusión y de lo Eterno.
Regala flor el amante, el novio, el esposo satisfecho
Porque demuestra con ello su pasión y su contento.
Pero también se le arrojan ramos de flores póstumas
Para quienes no lo sienten, puesto que son seres muertos.
Yo te regalo mis flores, tómalas como tú quieras.

23 de Noviembre de 1971

Cuando comprender puedas

Tú viste aquella flor, qué bella y lozana estaba.
Le faltó para morir sólo que yo la tocara.
Por eso debes cuidarte de mí, llevo conmigo la pena.
Déjame solo seguir arrastrando mi condena.

No pretendas tú ayudarme, eres joven y eres buena.
Tu vida recién comienza y la mía ya se seca.
Es Destino de Destinos, tú eres lo que yo soñé
Y al encontrarte te alejo, siendo que te ambicioné.

Por eso no te podría aconsejar que me quieras.
La vida me fue muy dura, la viví con mucha pena.
Ya un día lo has de saber, cuando comprenderme puedas.

Y sabrás por qué he volcado dolores en mis poemas
Y sabrás por qué he llorado y he buscado en las estrellas
La ilusión para la vida que ahora tanto nos acerca.

27 de Setiembre de 1957

martes, 9 de octubre de 2007

Tengo envidia, odio y celos


Tengo envidia del viento porque puede
Brindarte a su antojo sus caricias,
Tengo odio del sol porque te besa
La suave piel que un día fuera mía.
Siento celos del agua porque juega
Como jugara yo contigo un día
Y mezclándose en medio de tu pelo,
En tus carnes rosadas se desliza.
Quiero ser el perfume que tú usas,
Lápiz de labios que tu boca pinta,
El esmalte que pones en tus uñas
Y el género sutil que te perfila.
Tengo envidia del mar que con sus olas
Jugando con él, te arrastra y tira.
De la arena que pisas, de las piedras
Que aún lastimando te acarician.
Siento odio de todo el que te mira
Pues puede acariciarse con la vista.
Tengo celos del que puede murmurarte
Cualquier palabra, cálida o fría.

24 de enero de 1972

lunes, 8 de octubre de 2007

El Fantasma del Centro Gallego de Buenos Aires

Alrededor de 1984, un neumotórax espontáneo me sumió en una permanencia hospitalaria de un mes y medio, en una de las salas del segundo piso del Centro Gallego de esta ciudad. El médico a cargo salteó la intervención quirúrgica y, mediante un reposo controlado, devolvió mi pleura pulmonar a su lugar.
O sea, que mi estadía en el ámbito hospitalario, aparte de la cotidianeidad de los chequeos médicos, consistió en desayunar, almorzar, merendar, cenar, descansar y contemplar el medio que me rodeaba.
El bibliotecario de la institución de aquel entonces, el gallego Rodríguez, era amigo mío, y éste para amenizar la dimensión de mi estadía en aquel lugar, me prestaba libros. En su mayoría de y sobre Castelao. Paralelamente, a un par de salas de distancia de la que yo me encontraba, estaba aquélla en la que había fallecido Castelao, convertida en habitación-museo. En una vitrina se veían, entre otros objetos, las máscaras que este hombre había construido con fines teatrales y el espectáculo que daban esas máscaras se convirtió en mi dieta visual cuando los terapeutas me indicaron empezar a caminar y pasear por los corredores del piso.
Las noches del Centro Gallego estaban colmadas de fantasmas. A una hora imprecisa que rondaba las tres de la mañana, cuando se escuchaban alaridos y llantos, de pronto todo se sumía en un silencio irreal. Los fantasmas que se asomaban en esos momentos generalmente tenían aspecto de mujeres vestidas de negro, con rostros pálidos y dulces. Aparecían por detrás de la mampara que me separaba de mi vecino de cuarto y al verme sonreían, reconocían que no era a mí a quien venían a buscar, y desaparecían.
Una noche se me apareció el fantasma de Castelao. Salió del baño que quedaba frente a mi cama, con el gesto afable y compinche de quien acaba de orinar. Inmediatamente empezamos a compartir el tiempo como viejos amigos. Sus visitaciones se repitieron un par de veces más durante mi terapia, charlamos de todo un poco, jugamos a la brisca, nos contamos nuestras vidas…
Como sin darnos cuenta ni el uno ni el otro, él me reveló los misterios concernientes a ser un gallego porteño.
El fantasma es un amigo.

Relato de Yoel Novoa
“La noche de los museos” - Octubre 2007
Museo de la Emigración Gallega

domingo, 7 de octubre de 2007

Cómo te estoy esperando...


¡Cómo te estoy esperando!
¡Qué ganas tengo de ti!
¿Por qué no remontas vuelo
Y ya vienes junto a mí?

Óyeme, ¿no ves que sólo
De pena puedo morir?
¡Quítame de esta agonía,
Yo me curo junto a ti!

¿Te espero? ¿Llegas ahora?
¿Verdad que no tardarás?
Hoy ¿recuerdas? cumplo años.
¿Me vas a felicitar?

Sí, ya sé, está en el espacio
Tu voz llegando hasta mí.
Esperas que sea la hora
Y yo sólo te espero a ti.

7 de Octubre de 1955

viernes, 5 de octubre de 2007

Ciudad de ángeles

¿Sabrías cómo me llamo
si te viera en el cielo?

miércoles, 3 de octubre de 2007

MIS POESÍAS


Para que tú me leas un día y me recuerdes
Es que quiero dejarte, mi amor, estas poesías.
Un día he de partir, todo se muere…
Ellas han de durar más que mi vida.
Ellas han de evocarme en tu recuerdo
Cuando recorras mis páginas queridas,
Cuando recuerdes lo que yo he sufrido,
Cuando descubras mis lágrimas vertidas.
Cuando a solas contigo te preguntes,
Escuchando una suave melodía,
¿Por qué no estará él para escucharla?
Tendrás para entonces, amor, estas poesías.
Si, cuando yo ya no esté, un día
Tienes ganas de llorar enloquecida,
No esperes que yo venga a consolarte,
Te dejo para entonces mis poesías.
Ellas han de vibrar cuando tú quieras,
Ellas han de surgir cuando tú digas,
Ellas han de morir cuando tú mueras
Y han de vivir, amor, mientras tú vivas.
Las tendrás cuando tú las necesites
Para alivio de tu grande soledad.
Si así no fuere, amor, que no palpiten
Cuando mi cuerpo no palpite ya.

25 de Mayo de 1955

lunes, 1 de octubre de 2007

El camino de la vida

Cansado de caminar de la vida su camino,
Hice un alto no sé dónde y allí me quedé dormido.
Soñé cosas tan hermosas, vi paisajes tan lindos,
Que más tarde al despertar quedé gravemente herido.
Ya no podré más correr aquellos lindos caminos.
Ya se hizo mi vida sombra y con ella todo se ha ido.
Ya quedé en la vida muerto y perdido en el camino,
Camino largo que a veces nos ha asignado el destino.



9 de Agosto de 1956