Letras y Cuentos de mi Sangre: Ensayo

jueves, 20 de diciembre de 2007

Ensayo

Cuando el hombre encuentra el complemento de su yo, cuando el ideal de su espíritu se ha materializado en algo o en alguien, si ese algo o ese alguien le tornan inaccesible, vive entonces momentos de desesperación.
Es difícil que en el espíritu melancólico de un hombre que conoce las vicisitudes de la vida, la planta del amor eche raíces. Pero si esto sucediera, son ellas capaces de quitar en su espíritu las últimas gotas de savia que alimentan todo su ser.
¿Puede una persona enloquecer de amor?
¿Puede una mujer eclipsar para siempre la vida de un hombre?
Me consta que basta para ello una determinación un tanto apresurada, producto a veces de la misma convulsión psíquica a la que todo ser está predispuesto a vivir.
Cuando esto sucede, el dolor que nos produce se disipa con el tiempo, pero no encontraremos jamás el espíritu o el alma de ese ser que fue capaz de querernos con una pasión tan grande y tan ciega y que ya para siempre habrá de pertenecer a lo perdido.
La locura no es más que el abandono de la voluntad lógica del hombre. Si no hubiera lógica, si no hubiera concepto de lo bueno y de lo malo, todos seríamos locos o todos seríamos cuerdos. Pero lo cierto es que por ligera que sea la predisposición del ser a la locura, ésta puede llegar frente a un momento de fuerte decepción vivida. El amor puede ser un motivo, es a veces la tabla de salvación o de hundimiento, el paraíso o el infierno, el todo o la nada, a lo que el hombre entra porque es hijo del amor, porque nace del amor y porque sin él nada es concebible en el mundo de martirios en el que le toca vivir.

10 de Agosto de 1957

1 comentario:

la colo dijo...

simplemente....hermoso
gracias ,y gracias se que estas!! un abrazote ...
saludos !!!