domingo, 22 de noviembre de 2009
martes, 10 de noviembre de 2009
La espera

Fue sólo escuchar tu voz y transformarme al instante.
¡Qué terrible pesadilla! ¡Qué amor tan grande, tan grande!
Que sólo tu voz implica lanzar lágrimas de sangre.
Pasé después de aquel día un torbellino de espanto,
Nadé en mares de licores, viví en nubes de tabaco,
Luego quedé adormecido, como aquél que está esperando.
¿Qué esperaba? Sólo verte, sólo verte y escucharte.
Decirte, te quiero mucho, jamás podré olvidarte.
Que sólo tu voz implica lanzar lágrimas de sangre.
Pasé después de aquel día un torbellino de espanto,
Nadé en mares de licores, viví en nubes de tabaco,
Luego quedé adormecido, como aquél que está esperando.
¿Qué esperaba? Sólo verte, sólo verte y escucharte.
Decirte, te quiero mucho, jamás podré olvidarte.
28 de Agosto de 1960
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